Afectos

Las tortas de mi ultimo cumple en Argentina en 2009 (Si si, ahora tengo 28)

El vivir en el exterior es una tarea difícil, aunque ames el lugar en donde estas. El sentir que todo cambió y aceptar esta nueva realidad y todo el paquete de cosas buenas que viene con vivir en el "Primer Mundo" no tiene comparación con la tierra, la cultura y la familia de uno.

Como les conté anteriormente, vine aquí por primera vez a los 19 años, por lo que la mayoría de mi vida adulta pasó en este lado del hemisferio. Pero vengo de una familia muy unida, trabajadora  en la que mis viejos siempre hicieron todo lo posible para que podamos tener una buena educación y que nunca nos falte comida en la mesa ni amor. Pero es una familia a la que extraño mucho, y me encantaría a veces levantarme y tomar unos mates en el desayuno escuchando a mi hermana con sus ocurrencias mientras miramos alguna pavada en la tele, comer un asado de domingo toda la familia o disfrutar de jugar con mi sobrino mayor y ¡¡conocer al menor!! (con el que seguro nos vamos a llevar bien ¡espero!)

Lo difícil es cuando hay ocasiones especiales, esos "hitos de la vida" en los que a uno le gustaría estar. Y así me perdí casamientos de amigos, cumples de familiares ¡y ni hablar de nacimientos!o incluso los aún más complicados como la perdida de un ser querido. creo que esos son los momentos en que mas nos cuesta afrontar esta decisión de vivir en el exterior y en mi caso me replanteo que estoy haciendo acá. Me toco de cerca la muerte de mi abuela a las 2 semanas de haberme comprometido, y yo estaba en Inglaterra en ese momento. Pude cambiar mi pasaje y volver rápido, pero no pude estar para despedirme físicamente (aunque en ese momento solo estaba en UK por unos meses). Y la lista de momentos es larga y pesada y todavía me acuerdo de casi todos, y creo que a veces nos pesa mas para uno que está acá solo en el exterior que al personaje principal de la historia. Lo bueno es que gracias a la tecnología hoy en día uno puede estar en contacto y mantener los vínculos, además de sumarse por cámara a alguna reunión y cantar el cumpleaños  feliz por Skype. Y ni hablar de Navidad o Año Nuevo, despertándome a las 3 de la mañana para saludarlos a todos los que se la están pasando bomba mientras yo estoy en pijama muerta de frío y toda dormida saludando por la cámara.

Pero en UK también tuve la suerte de encontrar una familia,  los in-laws que si bien tienen su forma de ser y no veo tan seguido son geniales y sé que puedo contar con ellos cuando los necesito, y cada vez que nos encontramos la pasamos bien. Y además conocí mucha gente, algunos todavía están y otros ya volvieron a sus pagos, y con los que he vivido momentos muy lindos y han sido mi compañía en mis momentos especiales acá. Con muchos sigo en contacto vía facebook pero a otros les he perdido el rastro, aunque espero que sean muy felices.

Y asi van a seguir pasando muchas ocasiones, pero a veces hay que mirar the bigger picture (el retrato grande) y seguir para adelante. Además, lo bueno de esto es que cuando tenes la suerte de poder compartir uno de estos momentos con alguien, realmente podes sentir y vivir ese momento de una manera un poco mas especial que el resto, ya que uno sabe lo que cuesta y que somos afortunados de poder estar ahí, con toda la gente que querés.